¿Qué es la filosofía educativa Reggio Emilia?
El Colegio Alternativo en Chia, “Colegio Alborada, con más 19 años de trayectoria desde el nacimiento de su propuesta de educación alternativa en Bogotá que inició con la creación de jardines infantiles en Bogotá a través de una educación innovadora, con principios en crianza respetuosa. Tiene como base filosófica la propuesta Reggio Emilia, y hoy queremos hablarles un poco sobre ella.
La filosofía Reggio Emilia nació en Reggio Emilia, en una ciudad al norte de Italia. Después de la segunda guerra cuando los hombres habían ido a la guerra y en el país habían quedado las mujeres y los adultos mayores, por lo cual debían crear un lugar donde cuidar a los niños mientras las mujeres salían a trabajar.
Se reúnen pensadores como filósofos pedagogos, artistas, humanistas convocados por Loris Malaguzzi, fundador de esta iniciativa, se encuentran María Montessori, Piaget, Vygotsky, Erikson y John Dewey entre otros para pensar en una propuesta que reconoce al niño al centro de la experiencia educativa a partir de la pedagogía de la escucha (más adelante hablaremos sobre esto), el respeto y la consideración de las potencialidades de los niños y niñas, partiendo del derecho que tienen a ser educados en contextos dignos y exigentes acordes a sus capacidades.
Crean una escuela con dos aulas para 60 niños, esta experiencia permitió entender que la educación va más allá de la infraestructura, el espacio físico más que un espacio es un ambiente y se consolida como un lugar que promueve las relaciones e interacciones entre quienes lo habitan, como un espacio que posibilita el juego, la experimentación y la investigación colectiva.
Para la filosofía Reggio Emilia los espacios son lugares de encuentro que abrazan la diversidad de materiales, medios, ideas, preguntas : En la escuela Reggiana se priorizan elementos como el cuidado personal, la alimentación y una apuesta pedagógica pensada para los niños, niñas y jóvenes y con los niños niñas y jóvenes, con un gran sentido democrático, esta filosofía reconoce a la escuela como un espacio para generar conexiones y relaciones constantes entre los niños jóvenes y adultos, promoviendo la participación de las familias y la organización de la comunidad como eje fundamental de su estructura: la educación es una responsabilidad compartida y pensada democráticamente: aquí todos somos actores directos en la toma de decisiones, en la solución de situaciones y en la consolidación de propuestas.
En Reggio Emilia se produce un cambio histórico en la visión de los niños como “personas débiles” por la de los niños como sujetos de derechos que construyen y son capaces de elaborar sus propios procesos culturales: procesos que se relacionan y se comunican con el mundo desde el derecho al asombro, la imaginación y la creatividad para así resignificar sus propias vivencias.
Gracias a esta filosofía cambia, también, la imagen del educador pasivo o impositivo por uno que acompaña, que se concibe como un mediador socio cultural, que es investigador, que valora la cultura de la infancia y posibilita la co-construcción del aprendizaje junto al niño: un maestro competente para niños y jóvenes competentes.
La filosofía Reggio Emilia ha permitido a miles de profesionales vean la educación más allá del ámbito tradicional; Y en el Colegio Alborada de Chía podemos decir con orgullo que hemos sido formadores y facilitadores de esta transformación profesional, acompañando espacios educativos, instituciones y profesionales en Colombia y América.
La filosofía Reggio Emilia es una experiencia que involucra diferentes contextos y culturas, que valora a los niños como seres humanos que pueden transformar sus comunidades desde el desarrollo de su pleno potencial.
Reconocida ampliamente como una de las mejores propuestas educativas del mundo.
Con importantes testimonios sobre los resultados en la misma ciudad de Reggio Emilia, Italia y en el sistema de educación de los países escandinavos, en España y en Latinoamérica entre otros, los cuales se han basado en los fundamentos de la filosofía Reggiana en sus diferentes niveles educativos, y como resultado, desde hace más de treinta años han ocupado los primeros lugares a nivel mundial en los rankings de calidad en educación y parte de investigaciones de la universidad de Harvard.
Vamos a detenernos en dos aportes muy importantes que hace la propuesta Reggiana a la educación:
La pedagogía de la escucha y la documentación pedagógica:
La capacidad de escuchar y la recíproca expectación es una cualidad importante que permite la comunicación, el diálogo y requiere ser sostenida y entendida. De hecho, esta capacidad abunda en los niños pequeños, que son los mejores oyentes del mundo que les rodea. Escuchan a la vida en todas sus formas y colores. Escuchan a otros, adultos y compañeros-.
La socialización no se enseña a los niños: ellos son seres sociables. Aquí es donde la escuela juega un papel importante; debería ser, antes que todo, «un contexto de escucha múltiple», que involucre a maestros y niños, individualmente y como grupo; escuchar el uno al otro y a sí mismos. Este concepto de un contexto de escucha múltiple derriba la relación tradicional de aprendizaje-enseñanza. El enfoque cambia el aprendizaje: el autoaprendizaje de los niños y el logrado por un grupo de niños y adultos juntos.
La escucha y la documentación y para esto vamos a tomar textos de Carlina Rinaldi, asesora pedagógica de Reggio Children y directora pedagógica de las escuelas municipales de Reggio Emilia, en Italia.
La tarea de los educadores no sólo es permitir que las diferencias puedan ser expresadas, sino hacer posible que ellos puedan negociar y nutrirse a través del intercambio y la comparación de ideas. De esta manera, no sólo el niño como individuo aprende cómo aprender, sino que el grupo se vuelve consciente de ser «un lugar de enseñanzas», donde los lenguajes son enriquecidos, multiplicados, refinados y generosos pero también donde chocan el uno con el otro y se renuevan.
El maestro que sabe cómo observar, documentar e interpretar estos procesos, se hace consciente de sus potenciales como aprendiz: aprende cómo enseñar. En este caso, la documentación puede ser vista como una escucha visible: asegura el escuchar y ser escuchado por los demás. Esto significa producir huellas -como notas, fotos y videos- para hacer visible los medios a través de los cuales los individuos y el grupo están aprendiendo. Esto asegura que el grupo y cada niño puedan observarse desde un punto de vista externo mientras aprenden (durante y después del proceso).
La documentación incluye las transcripciones de comentarios de los niños y sus debates, las fotos de sus actividades y las representaciones de su pensamiento y aprendizaje al usar diferentes medios. La documentación tiene varias funciones, entre éstas: hacer conscientes a los padres de familia de las experiencias de sus niños; permitir a los maestros entender a los niños mejor y evaluar su propio trabajo, así como promover su crecimiento profesional; facilitar la comunicación y cambio de ideas entre educadores; hacer conscientes a los niños de que su esfuerzo es apreciado y para crear un archivo que traza la historia de la escuela y el placer de aprender por muchos niños y sus maestros.
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